Liga Endesa 2023-2024

Madrid, 19 de junio de 2023

José María Cañas, losojosdeltigre.com

Tras caer en el segundo partido prácticamente todo el mundo del baloncesto ha dado la final como finiquitada. La cuenta de la ACB no hace más que sacar videos de la celebración del Palau tras la victoria –muchas más de los que han sacado de las gradas del WiZink tras un título–, medios tan serios como gigantes ya hablan abiertamente de que Mirotic jugó su último partido en el Palau –como si llegar al quinto fuera imposible– y otros hablan de la superioridad barcelonista. La verdad es que no es raro, ya que nadie, en toda la historia, ha logrado remontar un 2-0 en la final

Sin embargo, si hay alguien capaz de lograr esa hazaña inimaginable ese no es otro que el Real Madrid. Tal y como ha afirmado el capitán Sergio Llull "Cuando vistes esta camiseta rendirse no es una opción", y los blancos ya saben lo que es lograr imposibles esta temporada. No en vano, tampoco nadie había remontado un 0-2 en Playoffs de la Euroliga y el Madrid lo lograría ante el Partizan.

Pero antes de plantearse siquiera soñar con la remontada, primero hay que seguir vivos y para ellos los blancos deben salvar este tercer partido. Un encuentro en que los blancos no solamente deberán dejarse hasta la última gota de sudor, sino que también lo deberá hacer el público. Desde la grada debemos empujar más que nunca en busca de una victoria que no solamente nos mantendría con vida, sino que nos daría un empuón que ahora mismo necesitamos para empezar a soñar. Si logramos este primer punto de la serie nada será imposible.

Madrid, 26 de enero de 2021

realmadrid.com

El Real Madrid finalizó la temporada después de perder el tercer partido de la final de la Liga ante el Barça en el WiZink Center. Se intentó y se luchó hasta el último segundo, pero tras 88 encuentros, uno cada tres días, las fuerzas estaban al límite. Aun así, el campeón de Europa fue fiel a su espíritu de sacrificio y mandó en el marcador hasta el descanso, pero un tercer cuarto en el que encajamos 29 puntos, acabó siendo decisivo. La derrota no empaña una grandísima campaña del equipo, que ha conquistado la Supercopa y la Undécima y ha dejado momentos para el recuerdo de todos los madridistas.

El inicio no iba a diferir del de los otros días con una igualdad total y diferencias mínimas en el marcador que propiciaron un 21-20 en el primer cuarto. El Madrid se mostró muy agresivo de cara al aro, sin precipitaciones (cero pérdidas) y haciendo daño al Barça en transición. La anotación estuvo muy repartida con 5 puntos de Musa y 4 de Hanga y Hezonja. El `pero´ fueron los tiros libres fallados. Por su parte, los azulgranas consiguieron sacar de la zona a Tavares y a partir de ahí generar ventajas con Laprovittola, Mirotic y Sanli.

Los visitantes sacaron rédito en los primeros minutos del segundo cuarto a la ausencia de Tavares en la zona con las penetraciones de Jokubaitis y la presencia física de Nnaji en la pintura. Un triple de Kalinic les ponía siete arriba en el 12´, lo que obligó a Chus Mateo a pedir un tiempo muerto con el 22-29. El técnico madridista recurrió a Llull, que volvió a responder a lo grande, encontrando un gran aliado en Causeur. El capitán aportó su habitual entrega y energía y anotó ocho puntos seguidos mientras que el alero francés se fue a 9 en este periodo. Entre los dos sumaron 18 de los 20 puntos del equipo, liderando un parcial de 17-7 con el que cambiaban la dinámica del partido y recuperaban la delantera antes del descanso (41-38).

Los nuestros tuvieron que hacer frente al gran acierto del Barça en el tercer cuarto, primero con las canastas de Vesely y luego con los triples (53-57, min.26). Pero el Madrid no desesperó. Siguió muy sólido con el tema de las pérdidas y encontró en el poderío interior de Yabusele y Tavares el antídoto para contrarrestar a los azulgranas con ocho puntos cada uno y un claro dominio en la pintura. La entrada de Poirier también fue importante ante un rival que continuó anotando de tres (66-67, min.30).

El Barça se mantuvo con mucho acierto en el tramo final y los nuestros no fueron tan agresivos en ataque como en los anteriores cuartos. Los visitantes se hicieron con el control en el último tramo de la mano de Vesely y consiguieron una diferencia superior a los 10 puntos que no pudimos salvar a pesar de pelear y darlo todo hasta el final (82-93, min.40).