Liga Endesa 2023-2024

Madrid, 18 de Junio de 2022

José María Cañas, losojosdeltigre.com

Cuando aún resuenan los ecos del partidazo cosechado por el Real Madrid el pasado viernes y que le ha permitido poner el 1-2 en su eliminatoria final de la Liga ante el FC Barcelona, el Madrid ya se dispone a jugar el que debería ser el partido definitivo de la serie. Desde las 6 de la tarde de este domingo los blancos buscarán su 36ª Liga en el cuarto partido de la final.

Pero lograrlo no va a ser nada fácil. Sarunas Jasikevicius ya advirtió tras el tercer choque que se jugarían la vida (a lo que hay que añadir a sus declaraciones de que hay que luchar con sangre tras el tercero) y Mirotic ha querido quitarse presión y trasladarla al rival a la vez que ha afirmado que serán más consistentes y duros que en los anteriores choques. Todo un aviso a navegantes de lo duro que va a ser este cuarto partido.

La realidad es que el equipo blanco no se puede permitir desaprovechar esta oportunidad. Un quinto partido en Barcelona sería una misión casi imposible de lograr y tras ver la superioridad que han exhibido los blancos durante los 3 primeros partidos no llevarse el título de Liga sería un duro varapalo. Es cierto que el equipo blanco ha sido claramente superior a su rival en los tres partidos (de hecho, el segundo se pierde por factores externos), pero también lo es que el balance de este año sigue favoreciendo a los culés y que ya en el primer año de Laso el Madrid acabó perdiendo una final con idéntico resultado al que ahora mismo lleva esta serie. Una experiencia que, aunque tan solo Llull queda de los que la vivió, debería servir como recordatorio para evitar cualquier tipo de confianza.

Claro que si los jugadores blancos deben evitar cualquier tipo de relajación y tomarse este partido como si fuera el quinto y último, igual debe hacer el público. Algunos jugadores como Vincent Poirier reconocieron tras el tercero que nunca habían visto al Wizink así de activo y empujando y, por mucho calor que haga hay que presionar igual o incluso más que el miércoles. Si logramos volver a ser El Sexto Hombre el título estará mucho más cerca.

Madrid, 20 de Junio de 2022

José María Cañas, losojosdeltigre.com

Lucha, entrega, pelea, unión, resistencia a la adversidad... esas son las claves que han permitido al Real Madrid conquistar una de las Ligas más complicadas de su historia. Una Liga cargada de obstáculo y que el equipo blanco ha logrado conquistar después de imponerse por 1-3 al Barcelona en la final, una última eliminatoria decidida en un cuarto partido en el que la presencia de Edy Tavares fue clave en el desenlace.

La realidad es que el camino hasta este título no ha podido ser más farragoso. De hecho, si hace dos meses aal que nos lo hubiera adelantado le habríamos tildado nada menos que de loco. En mitad de la peor crisis de la era Laso, con dos jugadores apartados por indisciplina, con Nigel Williams-Goss, Alocén y Anthony Randolph fuera de toda la temporada, con Llull y Abalde lejos de su mejor forma... La explicación de que se haya logrado dar la vuelta a todos estos problemas no es otra que el EQUIPO (así, en mayúsculas). Algo que se demostraría en la celebración del título cuando, Sergio Llull, decidía renunciar a levantar él su primer gran trofeo como capitán y dejárselo a Pablo Laso o cuando Causeur se subía a uno de los aros para dejar colgada allí la camiseta del lesionado Anthony Randolph.

Pero como toda la temporada, conquistar la Liga iba a ser un camino lleno de obstáculos. EL Madrid saltó muy bien a la cancha anotando un 7-0 de parcial inicial pero, a diferencia de en los anteriores tres partidos, el Barcelona no tardaría en reaccionar y, a base de defensa, complicaba muchísimo cada ataque blanco. Durante toda la segunda mitad de este primer periodo, el Madrid dependía en ataque totalmente de un Walter Tavares que parecía el único capaz de romper la resistencia blaugrana. Claro que al Barça no le iba mucho mejor y el cuarto acabaría con un paupérrimo 13-10 en el electrónico.

El inicio del segundo periodo coincidiría con el único intento serio de escapada en el partido. Un parcial de 11-0 de salida parecía que podía romper el partido , pero tras un par de intercambios de canastas el Barça recurría a lo único en lo que el Madrid no podía competirle: el triple. Dos lanzamientos consecutivos de Mirotic y Exum acercaban al Barça a tan solo 7 puntos, distancia que se reduciría aún más un par de minutos despiués tras otro lanzamiento exterior, esta vez de Kuric. El Madrid estaba muy atascado en ataque así que decidía volver a aferrarse a Tavares para coger aire, algo que ya le había funcionado en el primer cuarto y volvería a hacerlo en este: cinco puntos del caboverdiano permitían coger algo de aire a los blancos. Sin embargo, el Barça estaba entonado desde el triple y entre Calathes y Exum dejaban el marcador en un puño al descanso (34-33).

Tras el paso por vestuarios el partido seguiría siendo un continuo intercambio de golpes, eso sí con diferentes armas, mientras que el Madrid golpeaba a través de canastas de Causeur y Tavares, el Barça lo hacía de nuevo a través del triple con dos lanzamientos de Kuric y Mirotic que mantenían al equipo blanco al acecho (46-43). La distancia se mantenía entre los 3 y los 7 puntos y conseguir cada canasta era toda una odisea; por eso cuando el Barça lograba un 0-8 de parcial y se ponía por delante por primera vez en el partido las alarmas se encendía en el Palacio (55-56). Afortunadamente Poirier lograba una antideportiva a falta de 4 décimas que mantenía al Madrid por delante a falta de un cuarto (57-56).

Tras varios fallos en el inicio del cuarto definitivo, Calathes lograba volver por delante a los suyos, pero un minuto después Hanga daría algo de respiro a su equipo con un triple. El partido estaba muy apretado y, como en el resto del choque la solución para los blancos sería Edy Tavares. Totalmente imparable, el caboverdiano lograba volver a colocar a 5 puntos a los blancos (63-58). Al faro de Maio se le unirían poco después Gabi Deck y Fabien Causeur y entre los tres elevarían un puntito más la renta (72-63, min.37). El choque podía romperse definitivamente pero Calathes y Exum se negaban a entregar la cuchara y volverían a meter a su equipo en partido a falta de 2:30 (73-68).

El Barça estaba empujando por volver a luchar por el partido pero en ese instante volvería a aparecer Fabien Causeur que, con un 2+1 y un triple guillotinaba casi por completo el partido a falta de 1:13 (79-70). Davies respondería a continuación con un mate y dos tiros libres de Higgins colocaban a los suyos a 5 puntos a falta de 24 segundos pero el Sergio Llull y Rudy Fernández lograban sortear la trampa azulgrana en el siguiente ataque y le servían en bandeja un mate a Gabriel Deck que cerraba el triunfo y la trigesimo sexta Liga de un auténtico equipazo.

Madrid, 20 de Junio de 2022

José María Cañas, losojosdeltigre.com

Tras cinco temporadas en el Madrid en las que cada vez ha ido tomando más responsabilidad y después de que haya sido durante este tiempo objeto de numerosas críticas por no ser decisivo en ataque, por fin Edy Tavares ha demostrado su potencial en ambas zonas.

Tras una serie muy discreta en cuartos y mucho más decisivo en semifinales, ha sido en esta final donde ha arrasado a los pívots blaugranas que veían como el caboverdiano les quitaba una y otra vez los rebotes de las manos. Tras un partido algo discreto (7 puntos, 6 rebotes, 2 tapones), Tavares fue cogiendo ritmo y ya aportó más con sus 11 puntos y 15 de valoración en el segundo.

Sin embargo, donde realmente ha sido imparable ha sido en los partidos disputados en el WiZink Center. En el tercero apenas sumaría 10 puntos y 2 rebotes pero generaría un temor tremendo en la zona que le serviría para definitivamente hacer una exhibición en el cuarto y definitivo. Prácticamente alfa y omega del equipo, Tavares sumaría 25 puntos y 13 rebotes para un total de ¡41 de valoración.