Manuel García-Sanahuja fue presidente de esta peña a mediados de los años 90. Manolo tomó la presidencia en un momento muy complicado para esta asociación, tras la debacle del viaje a la Final Four de Atenas.
Sus primeras medidas fueron muy polémicas pero permitieron a la peña recuperar su propia viabilidad económica hasta tal punto que apenas unos meses después se fundaron varias secciones en otros puntos de España y se organizaría el mayor viaje de esta peña a la Final Four de Zaragoza con más de 3 autocares.
Por desgracia, al final de aquella temporada, y recién reelegido, problemas de salud obligaron a Manolo a dimitir y fue nombrado miembro de honor.